El investigador navarro José Javier Azanza López, autor de una tesis sobre “Arquitectura religiosa del Barroco en Navarra”, dio a conocer en un artículo de 1997 dos documentos del s. XVIII relacionados con el testamento del maestro de obras Juan de Larrea (c. 1675-1747), natural de Durango, “cuya intervención se documenta en los más destacados proyectos emprendidos en Navarra en la primera mitad del s. XVIII”.